Un giro inesperado toma la investigación sobre la muerte de Matthew Perry. La policía verifica la procedencia de la sustancia que consumió el actor, de 54 años, y que acabó con su vida de forma repentina en octubre de 2023.
De acuerdo con el portal de People, una fuente cercana a la policía de Los Ángeles declaró que la investigación concluirá pronto. Se decidirá si se presentan cargos contra “varias personas implicadas”, cuya identidad no ha sido revelada.
Las autoridades finalizaron la investigación en enero, después de que los resultados de la autopsia se revelaran en diciembre apuntando que el artista murió por los efectos de la ketamina, entre otras sustancias. No obstante, TMZ informó el pasado mes de mayo que la policía federal estaba investigando el uso de ketamina por parte del reconocido actor.
Mezcla letal
El citado medio señaló que la adquisición ilegal del medicamento motivó la intervención de las autoridades federales. Estos podrían presentar cargos contra quienes realizaron la transacción, ya que no debían haber vendido ketamina a alguien que también usaba buprenorfina.
El actor de “Friends” estaba recibiendo una terapia de infusión de ketamina para lidiar con problemas de depresión y ansiedad, aunque la sustancia que se halló en su sistema no provenía del tratamiento.
Desde el pasado mes de mayo, agentes federales, autoridades locales y efectivos de la DEA, comenzaron una investigando para saber cómo obtuvo Matthew Perry la sustancia que causó su muerte.
Por el alto nivel que circulaba en su sangre, el actor tuvo una sobre estimulación cardiovascular, una insuficiencia respiratoria y ahogamiento.
Fundación Matthew Perry
Matthew Perry en varias ocasiones se sinceró sobre su batalla contra la drogadicción, en especial con el uso de ketamina. Lo reveló en sus memorias “Friends, Lovers, and the Big Terrible Thing” (2022).
A tan solo días de su muerte la familia estableció la Fundación Matthew Perry para honrar su legado de apoyo. Se enfocan en quienes luchan contra la adicción. En vida, Perry siempre buscó ayudar a otros en su misma situación. Para 2012, transformó su mansión en Malibú en un centro de rehabilitación para hombres al que llamó Perry House.
“En el espíritu del compromiso duradero de Matthew Perry de ayudar a otras personas que luchan contra la enfermedad de la adicción, nos embarcamos en un viaje para honrar su legado. Establecemos así la Fundación Matthew Perry, guiados por sus propias palabras y experiencias e impulsados por su pasión por hacer una diferencia en tantas vidas como sea posible”, escribió la Fundación.