Este fin de semana la guerra mediática subió de tono en las redes que vienen desplazando la religión, tanto que si Marx hubiese vivido en estos tiempos diría que “internet es el fentanilo de las masas”.
De no ser porque en medio de tanta mentira en las redes también aparecen informaciones que ayudan a personas útiles como son los agricultores, pescadores y mineros… cualquier enemigo de la libertad plantearía eliminarlas.
Bien: lo cierto es que mientras Venezuela estaba en calma tanto en Miami como en España circulaban “noticias de última hora” donde informaban el paso de “bombarderos, sobre nuestro territorio.
Amistades radicadas tanto en Europa como en la Florida yanqui alarmadas me preguntaban sobre si “ya había comenzado la guerra”… y a todas no solo les expliqué la imposibilidad de tal hipótesis cuando el presidente Maduro por ejemplo estaba muy tranquilo en un acto con trabajadores en Catia… pero también y a regañadientes tuve que elucubrar otra hipótesis que explicara el por qué de tantos bulos circulando sobre nosotros.
Ojo, es absurdo que las guerras se anuncien por adelantado desde internet.
Si se ha visto que un mandatario acosado y con el agua al cuello invente escenarios tipo Hollywood para esconder la realidad.
Ese viejo truco, que pocas veces funciona, sirve, sin embargo, para pasar el tiempo que en el caso del presidente de USA es el que media entre la actualidad y las elecciones de medio término, que para Trump lo más probable van a resultar fatales.
Trump está obligado como el ciclista de aquellas primeras bicicletas a las que los ciclistas se encaramaban usando una escalera… a pedalear sin descanso… so pena de terminar preso.
No por los juicios que ha perdido, ya que con la dudosa viveza de haber inventado un “bitcoin” con su nombre y el escudo presidencial –el uno y Melania otro- se ha ganado más de 5.000 millones de dólares y podrá pagar los 300 que debe por juicios perdidos… sino porque al salir del poder le lloverán demandas por violar la Constitución cuyo castigo es la cárcel.
Entre esas violaciones está el de asesinar pescadores a los que tildó como “narcos”… en aguas internacionales… sin autorización del Congreso que Trump mantiene cerrado desde hace más de 20 días.
¡Allí está el origen de las amenazas contra nuestro país!
