El orégano es una herbácea perenne aromática del género científico origanum, que pertenece a la familia de las labiadas, ampliamente utilizada en la cocina mediterránea.
Es uno de los aromas más fáciles de identificar. Su olor es muy característico y es mundialmente reconocido. Es usado en la gastronomía y resulta casi imprescindible, es nuestra vida diaria.
Las hojas de la planta se pueden emplear tanto frescas como secas, pero habitualmente se usan más secas porque es como tienen más sabor y aroma. Lo asociamos con la cocina italiana, ya que se suele utilizar para condimentar pizza o para la preparación del muy conocido adobo.
Su plantación puede hacerse de varias formas, pero aquí les dejo solo dos: por semillas, las cuales se pueden sembrar directamente en el suelo o en macetas. Se colocan en la superficie y se cubren ligeramente con tierra negra. Por esquejes; se pueden tomar de una planta ya madura, sumergirla en agua hasta que formen raíces y luego plantarla en el suelo.
Su cosecha se da una vez que la planta tenga varios centímetros de altura. Esto estimulará el crecimiento de nuevas hojas. No se deben arrancar todas las hojitas y dejar la planta “pelada”. Solo se cosecha un tercio de la misma.